julio 01, 2009

Ridiculeces hechas en fiestas del trabajo

Cuando en la fiesta navideña del trabajo el año pasado la gorda de finanzas terminó bailando "la matraca" en medio de la pista con singular alegría por las botellas de tequila que había tomado creí que era hora de retirarme, pero lo confirmé cuando dio tremendo azotón necesitando 3 compañeros para poderla levantar.

Ese tipo de incidentes año con año son clásicos ya en estas fiestas de la compañía, afortunada mente hasta ahora siempre me he sabido comportar y es que no deseo caer en las bocas piadosas de mis compañeros de trabajo que son de lo peor y que pueden hacer que tu desafortunada anécdota se cuente en el comedor durante años y años.

Prueba de esto ultimo es que después de 6 años aun se sigue comentando cuando un vigilante completamente borracho, sin sentido ya se atrevió a sacar a bailar a la directora administrativa quien se negó rotunda y obviamente, pero y Chibamba (Les juro que asi se apellida el vigilante) ebrio hasta las manitas no aceptaba un NO por respuesta :

- Andele "direc" una no´mas- le decía Chibamba mientras se tambaleaba frente a la mesa de la directora.

La Dra. Barrera solo quería que la tierra se la tragara y que al vigilante un yunque lo aplastara. Se retiro inmediatamente de la fiesta y a la semana siguiente el vigilante fue castigado dos semanas pero no vayan a creer que fue venganza, quizás solo simple coincidencia.

Esa historia esta en el numero 1 de mi top 3 de "ridiculeces hechas en fiestas del trabajo que hacen que desees darte un tiro con pistola de chinampina"

En el numero 2 pongo a Carlos el de adquisiciones que se cree estrella de la salsa y aprovechando un descanso de la orquesta se adueñó del micrófono berreando 3 canciones de Marc Anthony a quien el jura parecerse. Lo peor es que lo hizo en ingles pues asegura que los dos meses que estudió en el Harmon Hall lo hicieron bilingüe.

En el numero 3 esta la güera cisneros y su vestido verde cargado de lentejuelas, shakiras y plumas con escote en la espalda y que dejaba ver su pierna derecha enfundada en una media de red. A sus 50 años debería saber ya que ciertas cosas no pueden hacerse en esta vida y con esto no me refiero a su mal gusto para vestir sino a la vez en que bailo "quebradita" con copas encima y termino tirando una mesa manchando, molestando y alterando a los 8 invitados que sentados ahí estaban.

Se acerca la fiesta de aniversario de la empresa y presiento que este año alguien superará mis espectativas y se pondrá en el numero uno de mi top. Yo por eso una copita de vodka y nada mas y como le digo a mi supervisora "usted en la fiesta lo único que tiene que hacer es sentarse, sonreir, comer y disfrutar, después... después no vamos de putas"

1 comentario:

RUY dijo...

aah jajajaja siempre son divertidas las fiestas así, mientras uno no sea la botana!! jajajaja ahí nos cuentas qué ocurrió, saludos!!